- Reafirmarmos nuestro compromiso con las actividades de reflexión y manifestación pública de descontento frente al actual modelo educacional, las cuales han sido organizadas y convocadas por las organizaciones estudiantiles y gremiales a lo largo del país, incluyendo a nuestra propia casa de estudios, la Universidad de Chile.
- Nos declaramos a favor de un trabajo con los estamentos de estudiantes y funcionarios, en miras a elaborar propuestas y apoyar las demostraciones públicas del movimiento nacional por la educación chilena.
- Respetamos las esperables diferencias de opinión entre diferentes personas, grupos y estamentos que son parte de nuestra Facultad, considerando siempre algunos principios básicos importantes para cautelar el éxito de un diálogo real y de las movilizaciones: sentido de unidad (para sumar en vez de restar voluntades), de comunidad (para estimular y resguardar un real diálogo y movilización triestamental, cautelando un clima de apertura, respeto y competencia de ideas) y de vocación por la democracia y la memoria, en el sentido de apropiarse de la historia de democratización de la Universidad de Chile del enfrentamiento a las políticas estatales protagonizada por sucesivas generaciones de estudiantes, funcionarios y académicos, asumiendo que tenemos que aprender unos de otros.
- Buscamos contribuir a esta lucha colectiva aprovechando nuestras fortalezas disciplinares e investigativas en dichos temas, teniendo claro que queremos resultados y respuestas concretas del gobierno y el parlamento, y no sólo hacer políticas testimoniales.
- Esperamos que funcionarios y estudiantes tengan la apertura y generosidad para comprender que nos encontramos en una tarea común y superior a nuestras opiniones y diferencias particulares, y que por lo tanto asuman la importancia de recuperar nuestro espacio físico común para facilitar la organización de actividades.
Asamblea de Académicas y Académicos
Facultad de Filosofía y Humanidades